Chocolate y Purpurina

GALLETITAS DE MANTEQUILLA

Hoy te traigo una receta rápida y riquísima, estas galletitas de mantequilla son estupendas para desayunar junto con un vaso de leche caliente o un colacao. Aunque si eres muy golos@ probablemente ¡no lleguen al desayuno!

¿Que cómo se hacen? pues, como siempre, muy fácil.  Lo primero de lo tendrás de preocuparte es de tener a mano los siguientes ingredientes: 

     - 4 cucharadas de mantequilla o margarina. 

     - 5 cucharadas colmadas de harina de trigo. 

     - 1 cucharadita de levadura en polvo Royal.

     - 5 cucharadas de azúcar. 

     - 2 yemas de huevo. 

     - Azúcar glass para espolvorear. 

     - Papel de horno o sulfurizado.

     - Un cortador de galletas.

¡EMPEZAMOS! 

Como ya os dije, esta receta es muy sencilla, sólo se trata de mezclar todos los ingredientes y amasar. Primero mezcla todos los ingredientes secos, es decir: azúcar, harina y levadura. 

Remueve bien con una lengua o una cuchara y a continuación agrega la mantequilla o margarina y las llemas de huevo. 

Amasa hasta que los ingredientes estén completamente integrados y la masa se te despegue de las manos. Si es necesario utiliza algo de harina extra para conseguir este efecto. No obstante, con estas cantidades debería de llegarte como para que te salga a la primera. 

No amases demasiado pues no pretendemos que la levadura suba. Haz una bola con tu masa y envuélvela en un trapo en la nevera durante una media hora aproximadamente. 

Transcurrido este tiempo, con la ayuda de un rodillo o el canto de una botella, estira tu masa hasta dejarla de un grosor de un centímetro aproximadamente. Y con un cortador de galletas, ve haciendo tus galletas y colocándolas sobre una bandeja de horno previamente cubierta con papel de horno. 

Precalienta el horno a 170º y déjalas hacerse durante 15 o 20 minutos. Míralas de vez en cuando, en cuanto estén ligeramente doradas, sácalas. No importa si a primera vista se ven blandas, una vez frías, endurecen solas. 

Eso sí, si se te han pegado unas a otras por haber dejado poco espacio entre ellas (hay que tener en cuenta que la levadura sube un poco y las hace aumentar su tamaño) este es el momento de separarlas. Hazlo despacito con un cuchillo. 

Una vez frías, espolvoréales azúcar glass avainillado por encima ¡Y listo! Preparadas para zampar. Riquísimas.